La asamblea comarcal de EQUO Avilés ha valorado la propuesta del gobierno socialista de Avilés de someter a votación una actuación urbanística en El Pozón, como un nuevo engaño.
Para EQUO es especialmente grave por dos asuntos que para nuestro proyecto son vitales:
– La participación ciudadana, que se ve totalmente manipulada,
– La falta de sensibilidad para el transporte sostenible y de un plan de movilidad.
Los planos de la actuación a los que hemos tenido acceso son del año 2010, lo que deja bien a las claras que se trata de un proyecto político de hace años, que se enmascara ahora como consulta a los vecinos; una consulta que además no permite opinar sobre las opciones reales que hay, y no solo sobre la que ya tienen en mente desde el 2010.
Ahora quieren ejecutar un viejo plan sobre la apariencia de consulta, amañando de antemano la pregunta. Es una forma de psudodemocracia teledirigida con dos respuestas: no hago nada o se hace lo que yo digo; ahora sí, eres libre para elegir.
En la solución propuesta para el caos de ese cruce hay al menos dos cuestiones que nos parecen fuera de lugar. Por un lado, entendemos que debería haber un Plan de Movilidad que recogiera todas las actuaciones bajo unos criterios claros de promoción y defensa del transporte público y sostenible. No podemos seguir admitiendo remodelaciones urbanísticas antes de tener un Plan de Movilidad, que es una de las promesas largamente incumplidas por el PSOE en Avilés. Vuelve a prometerlo para 2016, lo creeremos cuando lo veamos.
Por otro lado, desde EQUO presentamos hace cosa de un año una serie de propuestas para la remodelación de la movilidad en la ciudad, incluyendo una serie de itinerarios seguros para la promoción del uso de la bicicleta como modo de transporte no contaminante y sostenible. La solución mostrada choca frontalmente con el concepto de movilidad sostenible y con las “Smartcity sostenibles” que el gobierno de Avilés decía perseguir cuando presentó el proyecto DUSI.
La rotonda puede ser mejor para los coches, pero es mucho peor para peatones, autobuses y bicicletas. Defendemos la necesidad de un carril bici desde Villalegre hasta la calle Rivero y facilidades para el transporte público, como forma de reducir el tráfico y mejorar la calidad de vida de las personas.
Por último nos parece aún más grave que el plano que conocemos de la actuación forma parte de un plan mejora de las entradas de la ciudad, del año 2010, del que se habla bastante pero se conoce muy poco.
Los proyectos de ciudad no pueden estar guardados a criterio del gobierno de turno, han de ser proyectos de toda la ciudadanía.
Y como ciudadanía exigimos que se debatan más opciones con todos los grupos políticos y con expertos en movilidad sostenible e integradora.