Pilar Calvo y Adrián Blanco, coportavoces de EQUO Asturias, critican la inacción de los grandes partidos en cuanto a tomar medidas para avanzar por el camino marcado por la legislación europea para el correcto tratamiento del problema de los residuos.
La normativa europea marca claramente que es necesario profundizar en las fórmulas de reducción, reutilización y reciclaje, y solo en última instancia pasar a la valorización energética o el almacenamiento en vertederos. Sin embargo en Asturias, todo el debate se centra entre “incineradora si o incineradora no»
Mientras en Asturias más del 70% de las basuras van a vertedero, en muchos otros lugares se ponen en marcha programas de “residuo cero”, programas que afrontan el problema desde el principio, desde la generación de residuos, y que consiguen concienciar a la ciudadanía y las empresas de su importante papel en la no generación de residuos, precisamente para evitar los problemas derivados de las incineradoras.
Adrián Blanco recuerda que en muchos lugares donde se instalaron incineradoras, están llegando a utilizar estos sistemas de residuos cero, precisamente para evitar los graves inconvenientes derivados del funcionamiento de las mismas.
Desde EQUO-Asturias, hartos ya de este debate estéril y absurdo anuncia que el partido está trabajando en la elaboración de un plan alternativo, “que abordará el problema en su conjunto, se adaptará de verdad a la legislación más actual y facilitará que los ciudadanos puedan vivir en un entorno con menos residuos y menos contaminación.”
Para Pilar Calvo “resulta bastante preocupante que, a pesar de que la incineradora no está aprobada por ningún plan y tiene en contra la opinión mayoritaria de la ciudadanía, desde Cogersa se plantea una subida de tasas realmente vergonzosa, solo para tener dinero para pagar su construcción”.
Para EQUO Asturias es urgente cambiar el enfoque del problema de los residuos. Es necesario implementar las mejores fórmulas para reducir la creación de residuos y para reutilizar y reciclar la práctica totalidad de lo que se genere, para que la parte que vaya a vertedero sea no más del 10% de lo actual.
Según Adrián Blanco “para nuestra manera de entender este problema, llegar al vertedero, y mucho peor a la incineradora, es una muestra de fracaso rotundo en el gran problema que supone el tratamiento de residuos para la sociedad actual”.